Después de vacaciones regresamos a la vida de siempre, el mundo que yo controlo, en el que no están mis papás y puedo manejar mis comidas, ejercicios, etc., a voluntad propia...
Yo seguía con
L igual que antes, diciéndole que era mi esposo, y esas cosas. Pero ahora todo era diferente, porque el también me decía que era su esposa, y todo era un juego, pero en las noches cuándo
H, G, L y yo salíamos a platicar,
L y yo nos sentábamos juntos y real parecía que había algo más, así que poco a poco fui queriéndolo pero como algo más.
A los pocos días de entrar fue cumpleaños de un amigo, así que decidimos ir.
Íbamos en mi carro
G iba al lado de mí, y
L iba atrás, cuando
G puso una canción muy linda, le dije a
L que se la dedicaría y pase la mano para atrás para tomársela... y él también me la tomo... todo se veía muy bien... llegamos allá estuvimos hablando, y terminamos agarrados de la mano... ninguno estaba ebrio por lo que no le vi lo malo...
Eso paso un viernes, el sábado por la noche el salió con sus primos, y en medio de su borrachera, me marcó en la madrugada para decirme que realmente me amaba y lo repitió infinidad de veces... yo le creí y le dije que también lo quería pero que estaba tomado y que no pensaba bien.
Los detalles no importan, todo lo que hay que saber es que al día siguiente me marcó, diciéndome que no recordaba nada, que había estado muy ebrio, pero que lo disculpara porque no sabía lo que decía.
No tengo más que decir, que eso me destruyó completamente, y que ya no quería saber nada... era lo peor, ya que siempre salíamos los cuatro. Y a pesar de eso lo tenía que ver yo ya no sabía que hacer, y me encerre en mi mundo de nuevo, casi no salía, trataba de irme a dormir a casas de otras amigas, lo evitaba lo más posible... Y durante ese tiempo estuve entrando y saliendo muchisimas veces del mundo de Ana... poco a poco comprendí que cuándo la gente está ebria, dice incoherencias, así que lo acepte y me olvidé de
L, le di menos importancia y las cosas regresaron a la normalidad, sin embargo la gente nunca se dio cuenta de nada, puesto que yo seguía con la sonrisa de siempre, una alegría que no se ha visto antes por la vida, muchos de mis amigos me consideran la persona más feliz, y que más contagia alegría de las que conocen, pero ellos no saben que sólo es una máscara y detrás de eso, mi vida esta llena de altibajos, mas bajos que altos, pero que no es nada parecido a una vida feliz y mucho menos perfecta.
Tal vez con la otra entrada pensaron que sería más larga y más interesante la historia pero como paso hace mucho ya no la siento tan importante, sólo quería terminar de contarla pero no puedo dejar de mencionar que sufrí muchisimo y llore muchisimo por el... también cabe mencionar que los cuatro seguimos siendo muy buenos amigos y seguimos saliendo a todos lados.
Un día más acaba de empezar
